lunes, 11 de mayo de 2015

De amor no se muere.

Cuando él llega el tiempo parece que va a cámara lenta. 
Cuando se muerde el  labio creo que hasta el reloj de arena más viejo del mundo no tiene ninguna prisa en seguir avanzando. Y cuando ríe..Cuando ríe directamente el tiempo se para, se congela, es como un premio que me da la vida para poder disfrutar más tiempo de esa sonrisa que parece eterna aunque en realidad dure un instante.  El amor tiene que ser algo de eso.
Como cuando me mira a los ojos y todo nuestro alrededor desaparece, como cuando llega él y el invierno se viste de primavera, y la primavera de verano y se nos cae la ropa al suelo.   Y nos desnudamos sin tocarnos y luego empezamos a quitarnos la ropa, y la dejamos por el suelo, como banderas anunciando que esta noche hay guerra de besos en tu cama. Y no pienso darte una tregua.
Será que cuando tú apareces ayer es hoy y mañana solo es  un prologo de los besos de esta noche  y el pasado es futuro y el presente lo quiero contigo. Creo que has vuelto loco también al calendario.   
 Conviertes días grises en un lienzo en blanco donde poder dibujar mis penas para luego borrarlas. Y es que contigo las penas nunca dejan huella. Me curas las cicatrices solo con rozarlas, coses mis heridas a la vez que desabrochas los botones del pasado y dibujas un futuro en mi espalda.

He leído tanto sobre el amor que ya no se si realmente existe, no me creo que alguien que esté enamorado se atreva a definirlo, ni creo en los te quieros de rebajas, ni en las miradas con lástima, ni en las segundas partes,  Tendré que dejar de leer sobre ello y escribir nuestra propia definición del amor, o dejarlo sin definir i convertirlo en una escusa perfecta para seguir vivos. Recuerdo que alguien dijo que de amor no se muere…pero nadie dijo que no pudiésemos vivir de él.

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